Círculos de la Abya yala
En el año 2006 la casa de las mujeres nació en San Salvador de Jujuy. Las primeras actividades fueron talleres sobre violencia de género y educación sexual integral que se desarrollaron en diferentes barrios de la capital jujeña para mujeres y jóvenes. “Nació como una necesidad de las mujeres en un contexto machista patriarcal donde abundaba el silencio, el sometimiento y la inacción de las instituciones que debían resguardarnos y cuidarnos. Y fue por los muchos casos de violencia familiar que se acrecentaban y sufrían las mujeres que no encontraban un espacio donde fueran contenidas, escuchadas, que con un grupo de compañeras decidimos armar talleres populares, abrir un espacio donde podamos escucharnos, apoyarnos y ayudarnos”, explica Laura Canaza, representante de la organización.
A raíz de los diferentes casos de femicidios en la puna y quebrada y el incremento de casos de violencia que se fueron suscitando y llegando a la organización, se decidieron a armar un área de trabajo que partiera de la cultura originaria de las comunidades. Así surge el espacio “Maqanakuykuna Warmikuna”, que en quechua significa Mujeres Guerreras. Este espacio está integrado por distintas Comunidades con identidades culturales diversas. Las actividades se extendieron hacia las zonas de la puna y quebrada donde iniciaron los círculos con la necesidad de encontrarse y ayudarse en situaciones de violencia.
Retomar prácticas propias de los pueblos del Abya Yala fue la característica principal del proyecto “Círculos de la Abya Yala”. El trabajo se centró en crear espacios propios de las mujeres desde un punto de vista comunitario y territorial. Se sostuvieron encuentros donde se desarrollaron tareas de producción artesanal y prácticas tradicionales a la vez que se abordaron problemáticas económicas y sociales desde una perspectiva de género. De este modo, el trabajo se orientó a la autonomía económica y la sensibilización y capacitación sobre las violencias de género que sufrían mujeres indígenas.